Una de las dudas más comunes al migrar de Windows a Linux es la compatibilidad con aplicaciones que solo funcionan en el sistema de Microsoft.
Sin embargo, hoy en día existen herramientas que permiten ejecutar programas de Windows en Linux de manera sencilla y eficiente, sin necesidad de hardware adicional ni configuraciones complejas. En este artículo se presentan las opciones más accesibles para lograrlo.
La adopción de Linux como sistema principal ha crecido gracias a su estabilidad, seguridad y flexibilidad. No obstante, muchos usuarios dependen todavía de aplicaciones creadas exclusivamente para Windows.
En el pasado, la única solución era recurrir a máquinas virtuales o al arranque dual (dual boot). Hoy, gracias a herramientas como Wine, Proton y otros entornos de compatibilidad, es posible ejecutar la mayoría de los programas de Windows directamente en Linux, con un rendimiento cercano al nativo.
Herramientas para ejecutar aplicaciones de Windows en Linux
1. Wine
- Es la herramienta más conocida y utilizada.
- Permite ejecutar aplicaciones de Windows directamente en Linux, sin necesidad de emular un sistema operativo completo.
- Compatible con miles de programas, desde utilidades simples hasta suites complejas como Microsoft Office.
- Se instala fácilmente desde los repositorios de la mayoría de distribuciones.
2. PlayOnLinux
- Interfaz gráfica basada en Wine.
- Simplifica la instalación de programas de Windows mediante asistentes preconfigurados.
- Ideal para usuarios principiantes que no quieren complicarse con comandos.
3. Proton (Steam Play)
- Desarrollado por Valve y basado en Wine.
- Diseñado específicamente para ejecutar juegos de Windows en Linux.
- Integrado en Steam, permite instalar y jugar títulos de Windows con un solo clic.
- Compatible con tecnologías como DirectX 11/12 gracias a la capa de traducción DXVK.
4. Bottles
- Proyecto moderno y ligero que ofrece entornos separados para cada aplicación o juego.
- Permite elegir configuraciones predefinidas y gestionar dependencias sin dificultad.
- Excelente opción para quienes buscan un control más avanzado que PlayOnLinux.
5. Máquinas virtuales
- Aunque no es la opción más ligera, sigue siendo útil en algunos casos.
- Con herramientas como VirtualBox o VMware, puedes instalar Windows dentro de Linux y ejecutar aplicaciones en un entorno aislado.
- Recomendado para programas que requieren compatibilidad total, como software empresarial especializado.
Consejos para mejorar la compatibilidad
- Revisa la base de datos de WineHQ para verificar si tu aplicación es compatible.
- Usa siempre la última versión de Wine o Proton para aprovechar mejoras recientes.
- En juegos, activa DXVK o VKD3D para un mejor rendimiento gráfico.
- Considera el uso de Bottles si necesitas gestionar múltiples programas con diferentes configuraciones.
Ejecutar aplicaciones de Windows en Linux ya no es un reto exclusivo para usuarios avanzados. Con herramientas como Wine, PlayOnLinux y Proton, es posible correr software y juegos de Windows de forma rápida, fácil y eficiente, abriendo el camino a una migración más fluida hacia Linux.
Para quienes todavía dependen de programas específicos de Windows, estas soluciones representan un puente ideal que combina lo mejor de ambos mundos: la flexibilidad de Linux y la compatibilidad de Windows.
Fuente: somoslibres